Y después de #MeToo ¿Qué sigue?

Por: Cirze Tinajero

Difícilmente cuando a alguien se le mencione la frase #MeToo no sabrá de qué se está hablando. Este movimiento, surgido en redes sociales, ha tomado gran fuerza y puesto en la mira uno de los problemas a los que desafortunadamente nos enfrentamos como mujeres: el acoso sexual.

Y aunque pareciera que actualmente existe mayor apertura para abordar esta cuestión, la realidad es que aún la sociedad civil, las empresas y gobiernos tienen un largo camino por recorrer.

De acuerdo con Julieanne Himelstein, directora ejecutiva asociada de Kroll en Nueva York, si bien el movimiento le ha dado visibilidad a esta situación, es un hecho que muchas mujeres todavía se sienten inseguras para expresar que han padecido acoso sexual.

Nos da pavor hablarlo, que se nos juzgue. Nos da pánico lo que nuestra denuncia pueda implicar para nuestras carreras, ya sea que perdamos nuestros trabajos o que después ya no podamos integrarnos a otra empresa.

Es cierto, que celebridades, influencers, o gente exitosa se sume al movimiento le da fuerza y nos da un poco de confianza, pero necesitamos que más mujeres normales cuenten sus historias, que no se les juzgue, pero que sobre todo se les brinde una solución.

No olvidemos que el empoderamiento que las mujeres sienten actualmente es porque otras mujeres están hablando de sus propias experiencias”, comparte Himelstein en entrevista.

Como especialista por parte de Kroll, compañía enfocada en soluciones de riesgo y que ha realizado varias investigaciones sobre el acoso sexual en el sector empresarial, asegura que es fundamental que existan procesos de investigación ante la problemática del acoso sexual.

Creo que el movimiento de #MeToo trata de cambiar la cultura de las compañías, las impulsa a crear un ambiente en el que sea seguro expresarse, que se pueda hablar de ello, pero se necesita algo más”, comenta.

Y agrega que resulta fundamental que las compañías respalden a sus empleados, pero sobre todo que investiguen.

Con el movimiento de #MeToo en algunos casos no se le está dando la importancia debida al tema de evidencia, la investigación, y se debe tener muchísimo cuidado en ello.

Los reportes falsos pasan en todos los sectores y casos, no sólo con el tema del acoso sexual. Debemos empujar el tema de la denuncia y aceptar que existe el problema, pero debemos ser muy técnicos”, asegura.

Es por ello que toda empresa debe contar con los lineamientos y entorno adecuado para evitar el acoso, pero también saber qué hacer ante esta problemática.

Debe existir una política para que los empleados puedan acercarse sin miedo, sientan el apoyo de la compañía, sin importar las normas sociales.

Que se dé una investigación ya sea interna o externa y que existan todas las herramientas para que se llegue a la verdad, más que nunca las compañías deben buscar a expertos para el adecuado asesoramiento en el tema de acoso sexual”, puntualiza.