El mundo entero está pasando por una situación complicada que ha apagado los ánimos de muchas ciudades y personas. Israel no es la excepción pues las medidas sanitarias han dejado plazuelas, parques, avenidas y playas vacías; incluso Tel Aviv, la ciudad que no duerme, se ve apagada.
Pero los habitantes de Tel Aviv mantienen su espíritu alegre que logra iluminar a un país entero. Muestra de ello es la celebración que llevaron a cabo en su 111 aniversario. Las circunstancias fueron distintas pero el ánimo de las personas no ha cambiado. Por las calles de la ciudad circuló una camioneta invitando a toda la población a salir a sus puertas, ventanas o balcones para unir las voces en un solo canto.
Aunque no es el himno oficial, “Tel Aviv Ya Habibi Tel Aviv” fue replicado con alegría y gozo por todos aquellos que se unieron a una celebración distinta pero al final especial. El eco acompañado de aplausos y bailes de alegría se hizo escuchar entre las calles, los bulevares, los parques y todos los rincones que conforman la ciudad.
Fundada un 11 de abril de 1909, Tel Aviv fue la primera ciudad liberal, moderna y progresista del mundo. Sobre lo que era en ese entonces solo una montaña de arena, se colocaron los primeros cimientos de lo que años después se convertiría en una gran metrópoli. Actualmente la ciudad sigue en desarrollo e innovación y es un ícono de modernidad en todo Israel además de considerarse el Silicon Valley de Medio Oriente.
Haciendo honor a su sobrenombre de “la ciudad que no duerme”, Tel Aviv es el corazón de los festivales de música electro y techno. Sus calles se llenan de colores cada noche con la diversidad de centros nocturnos además de que sus kilómetros de playas son un punto de encuentro y una parada obligada para todo viajero.
Tel Aviv es ciudad tan pluricultural que rompe los paradigmas ortodoxos que etiquetan a Israel en todo el mundo. Con respeto y aceptación de ideas en Tel Aviv se puede tener una convivencia sin igual entre todo los credos religiosos, convicciones políticas y/o preferencias sexuales.
Esta celebración fue una muestra más de la unión, esperanza, convivencia