El uso prolongado del cubrebocas produce hipoxia, ausencia de oxígeno suficiente en los tejidos y lo cual afecta las funciones corporales.
Además, respirar una y otra vez aire exhalado, produce dióxido de carbono, por lo que en ocasiones al llevar mucho tiempo con la mascarilla uno se puede sentir mareado.
¿Qué más pasa?
- El uso de la mascarillas por muchas horas provoca malestar, pérdida de reflejos y de pensamiento consciente.
- Genera gran cansancio.
- Y en algunas personas al momento de conducir su auto con el tapabocas, el aire viciado les provoca desmayos.
¿Qué hacer?
- Lo recomendable es usarlo sólo si sales, pero sobretodo si tienes a alguien enfrente o muy cercano.
- Es importante levantarlo unos minutos si sientes que te asfixias.
- Suele ser contraproducente para las personas que atienden 8 horas al público, pues pueden llegar a intoxicarse, por ello es importante que tengan también otro tipo de protección como caretas.