Gran parte de su vida ha transcurrido entre escenarios y foros de televisión. Como integrante de Kabah ha pisado infinidad de recintos y en cada presentación pareciera que su total concentración y entrega está en que todo sea perfecto.
Sin embargo, lo que pocos saben es que en ocasiones el corazón y la mente de Daniela Magún están entre el público, específicamente en dos personitas: Liam y Julián, sus hijos.
De repente estoy en el escenario, en plena canción, los veo y entonces no puedo dejar de ser una mamá que se preocupa por ellos.
Me empiezo a preguntar: ‘¿tendrán frío? ¿ya les habrá dado hambre? ¿chance ya tienen sueño?’ Adoro que me acompañen a los conciertos, con todo y mis nervios, porque sé que están viendo a una mujer que ama lo que hace y se divierte con su trabajo”, cuenta en entrevista Daniela Magún.
Si bien sus hijos también disfrutan cada una de las canciones que mamá canta, hay algo más por lo que les agrada acompañarla en sus presentaciones.
Lo que más le gusta es el catering de los camerinos. A ellos les encanta poder escoger entre fruta, jugos, papas, carnes frías.
A veces van a dejarme a los conciertos, agarran comida y se van para la casa”, confiesa.
Desde una de las suites de Umbral, Curio Collection by Hilton, hotel boutique recientemente inaugurado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, Daniela Magún también aborda con toda sinceridad lo que significa ser madre.
Si bien confiesa que es muy consentidora, también se ha preocupado por los valores que les ha inculcado a sus pequeños.
Me siento orgullosa de todo lo que ellos hacen. La maternidad ha sido un gran regalo porque tengo dos seres humanos bondadosos que entienden las necesidades de los demás, que agradecen lo que tienen y sobre todo que, sin importar lo bueno o lo malo que puede pasar en un día, siempre sonríen”, asevera.
Con dos hijos de 11 y 8 años, reconoce que el camino con ellos aún es largo, pero sabe cuál es la ruta.
“Quiero que siempre puedan a ver los demás como sus iguales y se sientan orgullosos de sí mismos”, dice.
Sin embargo, no sólo Liam y Julián han aprendido de mamá, también ella ha explorado facetas musicales gracias a sus dos pequeños.
“Me impulsan a ser más creativa, ellos son mucho de música clásica, la cual no me atraía hasta que ellos me acercaron más a ella. Tienen una parte muy musical, de repente los encuentro tocando el piano o el clarinete”, expresa.
Su otro amor
Más allá de su carrera con Kabah, Daniela Magun ha sabido aprovechar su gusto y talento en la moda para conducir diversos programas de estilo de vida.
A lo largo de los años, su nombre ha influido en esta industria y es reconocida como una de las mejores fashionistas mexicanas.
“Para mí la moda es arte, creatividad. La moda marca historia, puntos de la humanidad y también es una manera de diversión.
“No sólo implica cómo te ves por fuera, sino también cómo te sientes por dentro”, asegura.
Su gusto por la moda no nació recientemente o inició como un simple hobby, sino que es una cuestión familiar.
Mi mamá siempre se dedicó a la moda, ella hacia los vestidos para Miss México, otros certámenes de belleza, las OTIs y ver esas mujeres ponerse estos grandes vestidos con plumas, sin duda eso sí me marcó”, explica.
Su vida como viajera
Con una sonrisa y total seguridad, Daniela Magún presume que es una trotamundos y que cuando hay que preparar maleta, no duda ni un poco en ello.
En donde me gusta gastar mi dinero es en viajar. Llevo toda la vida viajando, es parte de mí. Y ahora me encanta que mis hijos me acompañen.
Tengo ganas de llevarlos a un safari, pero siento que aún están muy chiquitos. Me voy a esperar unos tres o cuatro años más”, externa.
Y confiesa que en su equipaje hay algunos artículos que le resultan indispensables, sin importar el destino.
“Llevo un fular, me ayuda mucho en el avión por si el aire acondicionado está muy fuerte, si me quiero tapar la cabeza o si en el hotel me da frío, lo uso como cobijita extra.
“Siempre traigo uno en mi bolsa y otro en mi maleta. Además, viajo con una almohada chiquita tanto para el vuelo como el hotel”, explica.
Si bien es una amante de destinos mexicanos como Oaxaca y Chiapas, confiesa que todavía le falta conocer las Barrancas del Cobre. Mientras que internacionalmente desea recorrer Asia.
Tenía ya planeado un viaje a este continente, pero estaba muy nerviosa, algo me decía que lo cancelara, que no era mi momento, y aunque me dolió, supe que tenía que hacerlo, que no hay que ir a una travesía sin estar segura”,puntualiza la cantante.