Érika Raynal: Una visión única

Una visión única

Su entrega y compromiso han logrado que Érika Raynal sea una de las abogadas más destacadas del país, especialmente cuando se trata de derecho corporativo.

Sin embargo, hay un “lado b” que pocos conocen de ella y que en cuanto habla de este tema, su semblante cambia.

Una sonrisa aparece en su rostro, se muestra mucho más relajada y se nota que desea hablar al respecto hasta que la noche caiga…. Érika Raynal es una amante de la fotografía.

En algún momento mi mamá pensó que iba a dejar la carrera de Derecho y que me iba a dedicar a la fotografía porque de verdad es una de mis grandes pasiones.

Sin embargo, no fue así, y en realidad he aprendido a incluirla en mi vida, en mis viajes especialmente”, cuenta Érika Reynal en entrevista.

Basta pasar unos minutos con ella para percatarse de la pasión que tiene por esta disciplina y que no es ninguna amateur. Conoce perfectamente a los fotógrafos en tendencia, cómo se debe medir la luz y cuál es el equipo más adecuado para ciertas toma.

Cada vez que la agenda se lo permite, no duda en buscar el siguiente escenario que capturará en una imagen.

Tengo dos hijos, de 15 y de 13 años, entonces trato de que hagamos viajes interesantes a cada rato. A veces optamos por algo de aventura, mientras que en otras ocasiones buscamos más un sitio para relajarnos.

Y casi siempre llevo mi cámara, mi hijo más pequeño también ya ha empezado a interesarse por la fotografía, por lo que en las travesías salimos juntos a tomar fotos”, expresa.

Como viajera adora las actividades al aire libre, desde esquiar, rapelear, hasta correr maratones.

Pero más allá de su amor por las travesías, también es una mujer apasionada por su trabajo.

Como Socia de SAC González Benavides Abogados, una de las firmas más importantes del país, ha buscado demostrar su talento, entrega y también apoyar a sus colegas.

A lo largo de los años he visto que en el mundo de la abogacía han existido una serie de cambios muy importantes, con buenos y malos momentos, pero al final cada vez hay más apertura para las mujeres, poco a poco hemos ido ganando más espacios.

Y aunque a veces como mujeres podemos ser nuestras peores enemigas, creo que hemos entendido que es mejor hacer equipo, me parece que estamos en un momento único en el que no queda más que demostrar de qué estamos hechas”, puntualiza.