5 datos que debes conocer de Francisco Toledo

Francisco Toledo falleció este jueves 5 de septiembre en su natal Oaxaca, así lo confirmó su hija la poeta Natalia Toledo.

Foto: Secretaría de Cultura

Considerado como uno de los máximos exponentes de la plástica mexicana, su legado recorrió todo el mundo. Incluso sus piezas fueron alabadas por su gran riqueza artística y humana sin caer en ningún momento en grandilocuencias esnobs ni en folclorismos nacionalistas.

Ante su partida, a sus 79 años. Recordamos algunos de los momentos más icónicos de su vida.

  • Francisco Toledo nació en 1940. A los 14 años ingresó al taller de Arturo García Bustos, desde ese momento comenzó a pintar murciélagos, sapos, iguanas, monos, tortugas, lagartos, conejos, peces y cabras. Justamente serían los retratos, muy a su manera, de estos animales los que serían representativos de su obra a lo largo de su vida.
  • No era raro verlo caminando por las calles de la ciudad de Oaxaca donde residía. Siempre con su icónica figura: delgado, de manta y huaraches, y la barba cana.
  • En enero de 2015, Toledo vendió toda su colección del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) al Instituto Nacional de Bellas Artes. Sus 125 mil obras fueron vendidas por un peso; realmente fue una venta simbólica y en ese momento comentó que al tener 74 años se estaba preparando para “dejar todo en orden”.
  • Uno de sus actos recientes más entrañables fue el de pintar papalotes con los rostros de los 43 normalistas de Ayotzinapa y volarlos por las calles de Oaxaca.
  • Fue esposo de Trine Ellitsgaard y padre de cinco hijos, entre ellos, los artistas Dr. Lakra y Laureana Toledo, así como la poeta Natalia Toledo.